LA OBRA, con Mariela Acosta, le puso voz a la histórica y silenciosa asistente de la cocinera Doña Petrona C. de Gandulfo.
Con la notable actriz Mariela Acosta en escena, anoche cerró la temporada 2023 del ciclo gratuito y municipal Platea Abierta en San Isidro. Y lo hizo con Juanita habla. Juanita, la emblemática asistente de la cocinera Doña Petrona C. de Gandulfo, precursora del arte culinario en la televisión, que anoche habló, hizo reír y reflexionar al público que se acercó al Centro Cultural San Isidro, en la Avenida Del Libertador 16.138, casco histórico de esta ciudad.
“Cerramos un ciclo que nació exitoso y vino a cubrir una necesidad, la del teatro independiente de altísima calidad, cerca de nuestras casas y con acceso gratuito. Pero además, a lo largo de estos siete años, disfrutamos de charlas post función con los elencos que nos permitieron entender de primera mano el quehacer teatral, las motivaciones, búsquedas y procesos de las obras.”
ELEONORA JAUREGUIBERRY, secretaria de Cultura y Ciudad de San Isidro.
Y Juanita (Juana Bordoy), quien nunca habló delante de cámaras en sus treinta años como colaboradora de Doña Petrona, esta vez habló de sus orígenes en el bonaerense partido de Pellegrini, de su devoción por su patrona, a la que escuchaba por radio, del primer encuentro entre ambas, de los inicios en el programa de tv Buenas tardes mucho gusto y también del ocaso de la conductora.
Una comedia dramática de apuesta simple y efectiva: una silla y una cocina, y con una Acosta asumiendo también el rol de la cocinera, quien da ordenes: “La torta me la da por derecha, el repasador por la izquierda, las claras por derecha, el molde para las vainillas, por izquierda. Cuando yo digo El éxito que obtiene con sus recetas es mi éxito, usted estará de espaldas, la espalda es muy importante en la televisión, porque realza, y cuando declamo El relleno puede ser cualquier cosa, pero no cualquier cosa puede ser rellena, usted espera, me aguanta la respiración 50 segundos y retira la flanera…”
Mezcla de sumisión y devoción, Juanita, la más fiel, la que siempre acompañó desde el segundo plano, habla y no se sale de sus casillas, salvo en los sueños, donde grita, baila y… da órdenes.
“Es un misterio. No soy fanático de la cocina, sí conocí a Doña Petrona de chico y quería escribir sobre ella, pero en un momento me tomó la voz de Juanita, contar a Doña Petrona a través de su asistente y ver qué ocurría con ese silencio. Pasaron diez años desde aquella primera idea hasta que la obra se cristalizó.”
DAMIÁN DREIZIK, autor de la obra, al inicio de la charla con el público.
Un trabajo de investigación que halló documentación sobre la cocinera, pero nada de su asistente, salvo lo que se ve en los programas de tv.
“El recorrido de Juanita me resultó más complejo, un gran desafío. A través de su temperamento, de cómo caminaba, de sus gestos, empezó a aparecer esa voz que nunca habíamos escuchado, pudimos imaginarla, fui encontrando a mi Juanita.”
MARIELA ACOSTA, actriz, sobre un proceso que creció entre tres: ella, Dreizik y la directora Vanesa Weinberg.
Alguien del público le elogió el tono de voz increíblemente parecido al de Doña Petrona. “Siento que Doña Petrona tiene algo físico muy particular y donde me pude acomodar, esa cabeza inclinada. El dispositivo del vestuario me ayudó a armar ese cuerpo y esa forma de moverme. Así –explica la actriz-, fui encontrando la forma de colocar esa voz, con algún rasgo santiagueño y en esa respiración alta”.
Una obra que en sus inicios tuvo a Dreizik como autor y director, que comenzó a ensayarse con dos actrices (una de ellas fue Weinberg) y que terminó siendo un unipersonal.
“El remate de los objetos de cocina de Doña Petrona realmente existió y fue un duro golpe para Juanita, que murió tres años después que su jefa”, cuenta el director. Y sigue: “En la anteúltima función en el teatro El Extranjero vino una señora cuyo papá había sido compañero de Juanita con una foto de ellos en primer grado. Increíblemente, su expresión era la de Mariela”.
Weinberg cierra luego con otro dato que despertó más aplausos: “En Bocayuva, partido de Pellegrini, que hoy tiene 120 habitantes y donde nació Juanita, le hicieron un monumento que dice: A quien puso en valor el arte de la colaboración”.
“Nos encantó. Juanita está maravillosa. Una gran salida de domingo”, asegura Teresita Farraz, maestra jubilada y en su primera vez en el ciclo. “La actriz, excepcional en todo sentido, y la charla es muy importante porque nos pone los puntos más claros, esas cosas que una no puede llegar a hilar”, expresa la vecina del barrio Gisela Di Rosa, antes de dejar la butaca.
